Hoy día, el cambio climático es provocado por la emisión de Gases de Efecto Invernadero, en especial del CO2, los cuales son generados por las actividades humanas que realizamos para movernos y alimentarnos, además por el uso de electrodomésticos y equipos que implican el consumo de energía.  Por esta razón es que todos contribuimos con emisiones a la atmósfera y por lo tanto también es responsabilidad de cada uno tomar acciones para contrarrestar nuestra huella de carbono.

La huella de carbono, es una medida que permite a los individuos y a las empresas cuantificar sus emisiones de CO2 que son liberadas a la atmósfera debido a sus actividades cotidianas o a la comercialización de un producto, permitiéndonos hacer conciencia del impacto que causa al medio ambiente. Se calcula teniendo una base establecida de acuerdo a cada actividad que realicemos.  Se puede usar una calculadora de huella de carbono; aunque ninguna es perfecta te pueden servir para darte una idea de tu impacto personal, en este link hay una  http://neotropica.org/article/calcule-su-huella-de-carbono

Con la iniciativa para medir la huella de carbono podemos valorar adoptar un cambio de hábitos con el fin de consumir menos energía y realizar inversiones que contaminen menos; aunque por lo general se piensa que la sostenibilidad ambiental tiene que tener rentabilidad económica en el tiempo. De ser así dejaríamos de lejos su verdadero objetivo de producir y vivir con el menor impacto medioambiental posible logrando un equilibrio entre la sociedad y la naturaleza.

Y es que en realidad no todas las inversiones que se hacen para lograr Sostenibilidad Ambiental son por sí solas rentables ni suponen ahorros inmediatos, debemos entonces ir un poco más allá y dejar de pensar en el corto plazo y hacer cosas a largo plazo identificando qué es un gasto y qué es una inversión a futuro.

Como personas debemos pensar en vivir en un entorno libre de contaminación, ríos limpios, etc. que nos permita disfrutar de los recursos naturales en un clima que no castigue con inundaciones o épocas glaciares.

Para esto podemos seguir las siguientes recomendaciones básicas.

1. Usar bombillos de bajo consumo como fluorescentes o LEDs y aprovechar al máximo la luz natural.

2. Apaga la luz cuando salgas de una habitación.

3. Utiliza lo más posible la luz natural, abrir las cortinas y colocar tragaluces, además utilizar pintura blanca o clara para cielorrasos y paredes.

4. Si requiere el uso de aires acondicionados, graduar el termostato a una temperatura soportable de 24C.

5. Usar la lavadora llena y con agua fría; ahorrarás agua y electricidad.

6. Sustituir los electrodomésticos viejos, de más de 10 años, de alto consumo eléctrico, por otros modernos de bajo consumo; la diferencia de costo se paga con el ahorro de energía.

7. Mantener las puertas de los refrigeradores cerradas, asegúrate que selle herméticamente, y no introduzca alimentos calientes.

8. Apagar la computadora si no lo estás utilizando y desconectar todos los aparatos eléctricos que no estés utilizando, al estar conectados consumen energía (aunque no estén encendidos).

9. Evita usar la plancha en exceso, esta tarea realícela preferentemente en horarios de menor demanda de energía, es decir, durante la mañana o la noche.

10. Si se tienen cocina eléctrica es mejor sustituirlas por cocina de gas.


En el caso de las empresas estas acceden a la Sostenibilidad como una nueva forma de liderazgo y para mejorar su competitividad, pero también lo hacen buscando certificaciones que le generen renombre, aunque no se trata de esto, repercute positivamente en la percepción de sus clientes.

Podemos encontrar esfuerzos industriales tales como:

1. Mejores diseños eléctricos en sus instalaciones, evitar las caídas de voltaje y ubicar cargas cerca de tableros principales.

2. Mejor mantenimiento de equipos para mantener su eficiencia.

3. Administrar la demanda eléctrica desplazando los picos más altos de potencia a periodos fuera de horarios punta.

4. Usar 480 Voltios en lugar de 208 V / 240 V.

5. No usar motores monofásicos, rebobinados, de segunda, ni sobre diseñados.

6. Evitar instalar motores en lugares con poca ventilación y evitar que trabajen en vacío por mucho tiempo.

7. Corregir el factor de potencia.

8. Utilizar equipos para lograr administrar la energía de manera automática.

9. Cambio de equipos viejos por otros más eficientes como iluminación y aires acondicionados entre otros.

10. Evitar fugas de aire comprimido y regular la presión en suministro de agua.

11. Solicitar al gobierno que ofrezca energías alternativas para la producción de electricidad, generadas por energía solar, geotérmica, eólica, hidráulica entre otros.


La mayor ganancia obtenida realizando acciones que ayuden a minimizar nuestro impacto en este planeta es conservarlo para las futuras generaciones que les queda mucho camino por seguir.



Por Ing. Renato Soto